miércoles, 22 de enero de 2014

Mediando con la campana extractora

Una cocina que se precie debe tener una buena ventilación y en su defecto una buena campana extractora. Es fundamental evitar que los olores y en especial, los malos, se expandan y llenen toda la casa.

En una mediación ocurre lo mismo, es fundamental que el aire corra y se lleve los rencores, los malentendidos y malos modos, por lo que el mediador debe favorecer que el ambiente sea lo más ventilado posible. 




Consejo mediador: Lo que ensucia y da mal olor, mientras más pronto lo eliminemos, mucho mejor.

mediacion

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena comparación

Lucas dijo...

El humo no deja ver la comida y la tensión no deja conciliar

Anónimo dijo...

La hoja de los àrboles no deja ver el bosque

Manolo el del bombo dijo...

Una mediación es como una mudanza, se necesita de alguien que extraiga o quite lo que ya no necesitamos o ya no tiene uso

Anónimo dijo...

Prefiero un ventilador y que reparta el humo

Anónimo dijo...

La mejor ventilación , una ventana abierta y que se vaya todo lo malo

Eli dijo...

Cuando el problema es muy gordo no lo arregla ni las campanaas de Notre Dama

Sara B. dijo...

El humo es señal de fuego y mientras más pronto lo extraigamos , màs pronto veremos el origen del conflicto

Anónimo dijo...

En el siglo XVIII las campanas sólo existían en las iglesias, y las ventanas, aquí en el norte, eran escasas y pequeñas para evitar que entrara el frío por ellas. Sin embargo, la chimenea del hogar se abría al cielo, dejando salir lo que no era bueno. Sirvió para alimentarnos, calentarnos y, si lo pienso un poco, creo que fue nuestro mediador del siglo XVIII. Un abrazo de 'Manuela'.