¿Se puede mediar entre Jesucristo y Cleopatra?
¿Se puede mediar entre la Paciencia y la Impaciencia?
¿Se puede mediar entre el agua y la cerveza?
¿Se puede mediar entre la gamba de la terraza y la de Calima?
¿Se puede mediar entre vísceras y aceitunas?
¿Se puede mediar entre Fresas y Chirimoyas?
¿Se puede mediar entre el rojo del gazpachuelo y el negro del calamar?
¿Se puede mediar entre París y Roma?
¿Se puede mediar entre el adolescente aventurero y la joven bailonga?
La respuesta es SI y en Málaga lo podemos comprobar, se SOLUCIONA todo.
La mediación es posible si se establece una tarea para cada día, una dosis de paciencia y enfrentarse al conflicto con optimismo y mucha ilusión.
Dicho trabajo de constancia tiene un premio: Un viaje a Nueva York para dos personas.